Las personas que siguen una dieta mediterránea consumen menos grasas saturadas. Esto es lo contrario a las fuentes de alto contenido de grasas saturadas consumidas típicamente en los EE.UU. – aceites vegetales, margarina y grasas animales tales como mantequilla y manteca de cerdo.
Las verduras tienen un lugar central en la dieta mediterránea. A diferencia de los EE.UU., donde las verduras son generalmente considerados platos de acompañamiento, en la dieta mediterránea hay un énfasis mucho mayor en las frutas y verduras y sus beneficios para la salud. Contienen la mayor parte de las vitaminas y minerales que son esenciales para una dieta saludable. Además, son excelentes fuentes de fibra con pocas calorías.
Dada la proximidad al Mar Mediterrraneo, el pescado es una parte central de la dieta mediterránea. El pescado no sólo es una fuente saludable de proteínas, sino que también tiene el beneficio añadido de un corazón saludable con el Omega 3. (Esto suponiendo que no es una fritura)
Los cereles integrales son excelentes fuentes de fibra y antioxidantes. Reducen los riesgos de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, cáncer y obesidad. Debido a que se absorben más lentamente , hay menos picos de azúcar en la sangre después de las comidas, reduce el riesgo de resistencia a la insulina y la diabetes.
Las grasas de origen animal, como la carne roja y los huevos son ricos en colesterol y si se consume en grandes cantidades puede aumentar su riesgo de enfermedad cardíaca. En la dieta mediterránea estos alimentos se comen un par de veces a la semana.
Por qué el Aceite de oliva & Dieta Mediterranea son saludables
– Bajos en Grasas Saturadas
– Rico en MUFA (acido oleico)
– Rico en Vitaminas, minerales y fibras
– Ricos en anti-oxidantes (polifenoles)
LOS 5 BENEFICIOS PARA LA SALUD DEL ACEITE DE OLIVA (APOYADOS CIENTIFICAMENTE)
– Aceite de oliva virgen extra, el rey de la cocina mediterránea, siempre ha sido considerado como un aliado valioso salud. Este jugo natural que puede ayudar a
– Baja nivel de colesterol malo y presión arterial
– Protege de los proceso oxidativos
– Previene el cáncer
– Ayuda a las funciones cognitivas